La teoría del amor cortés supone una concepción platónica y mística del amor, que se puede resumir en los siguientes puntos:
Total sumisión del enamorado a la dama (por una transposición al amor de las relaciones sociales del feudalismo, el enamorado rinde vasallaje a su señora).
La amada es siempre distante, admirable y un compendio de perfecciones físicas y morales.
El estado amoroso, por transposición al amor de las emociones e imaginería religiosas, es una especie de estado de gracia que ennoblece a quien lo practica.
Los enamorados son siempre de condición aristocrática.
El enamorado puede llegar a la comunicación, con su inaccesible señora, después de una progresión de estados que van desde el suplicante (fenhedor, en occitano) al amante (drut).
Se trata, frecuentemente, de un amor adúltero. Por lo tanto, el poeta oculta el objeto de su amor sustituyendo el nombre de la amada por una palabra clave (senhal) o seudónimo poético.
0 comentarios:
Publicar un comentario